A Dios lo que es de Dios

Lo que hemos vivido desde 2020 revela que no sabemos nada de salud, ni de ciencia, ni de política, ni de economía, ni de espiritualidad. Es así como la mayoría de países "compraron" no solo el discurso sino millones de ampolletas que resultaron gratis para el ciudadano pero caras para los países, cuyos gobernantes hicieron el negocio sin mucha vigilancia. Ya está muy afinado el truco de crear un "Estado de emergencia", bajo el cual, un presidente firma decretos a diestra y siniestra, literalmente, asignando negocios por igual a sus compinches o a sus supuestos opositores. La mayoría de las personas movidas por el miedo que consumen en tres dosis diarias de noticiero, le dieron todo al César y nada a Dios. Hicieron la fila, pusieron el brazo una, dos, tres, cuatro y hasta cinco veces, no tanto por estar convencidos de la peligrosidad del supuesto bicho, sino por miedo a perder el trabajo, el viaje, la atención médica y miedo de contagiar a otros, que fue el argument...