¿No sabes en qué creer?
En la era de la atomización de la información y cuando a los grandes medios solo les queda el recurso de las tragedias o maquillar decadentes concursos para generar audiencia es cuando más atentas debemos estar a las fuentes que consultamos, especialmente en temas sensibles como la salud, la espiritualidad o la crianza de nuestros hijos.
¿Cuál es la mejor terapia? ¿Debo hacerme un examen anual de mis pechos? ¿Conviene hacerme una constelación familiar? ¿Es verdad que el autismo proviene de las inoculaciones?
No importa el tema que te cuestiones, lo importante es que no estés en la vibración del MIEDO y puedas discernir la propia pregunta. Y aquí entra un factor único que solo tenemos las mujeres de este lado del mundo: libertad.
Por fortuna, en gran parte de América Latina todavía no estamos en regímenes totalitarios en los que a las mujeres no se les permite explorar y avanzar intelectualmente. Somos nosotras las que nos quedamos atrapadas en lo que ofrece el sistema, desconociendo que hay medios alternativos no solo en la comunicación sino también en la capacitación y en la sanación del cuerpo y del alma.
INTUICIÓN, esa es la palabra clave. Hay que seguir al corazón y detenernos cuando algo no nos cuadre, sea una noticia o un aviso. La obediencia ciega es algo que se nos quedó de siglos y siglos de sometimiento y que depende de nosotras erradicar. Debemos pasar a la CONCIENCIA, al análisis de las cosas, pensar un poco, estudiar los temas y no quedarnos con lo que nos dice el telediario o las redes sociales en las que miles de personas ganan dinero para opinar en favor o en contra de algo y tú sin saberlo te sumas a la mayoría pensando que por eso algo es bueno.
Sí, hay desinformación, porque este mundo está en constante cambio y cada minuto se abren más y más posibilidades. No te quedes con los titulares, ve hasta el fondo de la noticia y compara varias fuentes. Especialmente fíjate quién financia al medio que estás siguiendo y sabrás por qué te hablan con tanta insistencia de algo.
Y si no sabes en qué creer tal vez necesites visitar algunos canales alternativos, salir de la matrix, de la caja, y darte cuenta de que estamos en un momento maravilloso en el que tenemos la oportunidad de replantearnos muchas teorías.
Hay que aceptar únicamente aquello qué nos hace sentido y qué nos resulta lógico dentro de un sistema supuestamente democrático en el que se puede elegir desde un gobernante hasta un remedio.
La gran minoría de la población "libre" del mundo está poniendo en duda la forma de la tierra, las rayas del cielo, las emergencias sanitarias, los cambios del clima, las sociedades secretas, las soluciones con pinchazo, los supuestos géneros y sus disforias, la supuesta llegada a la luna, los supuestos satélites, la naturalidad de los incendios y muchos otros temas que tienen que ver con el origen del ser humano y sus altas capacidades.
Y como ya es un hecho que el ser humano está despertando de ese letargo intelectual es obvio que surjan grandes movidas como la famosa agenda creada por unos pocos desquiciados que quieren imponer al resto del mundo sus ideas, pero sobre todo, mantener el control.
¿Sabes lo que se conoce como Ingeniería social? Estúdialo, quizás descubras temas muy interesantes para analizar y decidir por tu propia cuenta en qué creer y en qué no.
¡Abre los ojos! ¡Despierta!
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