¿Qué es el Coaching Holístico?

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jueves, 4 de diciembre de 2014

El conflicto como oportunidad

Cualquier situación de conflicto es una oportunidad para evolucionar. Y por conflicto podemos entender un choque, una insatisfacción frente a algo a alguien. Es válido no estar de acuerdo, es válido no aceptar algo, lo importante es entender el origen de la desarmonia para volver a poner en orden las fichas y comprender hacia dónde nos está llevando la vida.

Reconocer en el conflicto una oportunidad requiere atención y amorosidad; de nada sirve enfrentarse y causar daño a otros, se trata de ir aceptando las circunstancias como una disposición divina que está muy por encima de nuestro limitado entendimiento.

Tomar tiempo para estar en quietud y respirar de manera consciente nos permite entrar en un estado de iluminación en el que van a apareciendo ideas y nuevas señales para seguir adelante. No vale la pena quedarse en el conflicto para repasarlo una y otra vez, eso sólo causa más y más heridas. 

El conflicto es la gran señal para el cambio; cualquier dificultad, cualquier obstáculo, es literalmente un semáforo que puede estar en amarillo o en rojo. Si el conflicto, el choque o la dificultad es lo bastante grave como para detenernos, entonces el semáforo está en rojo y lo prudente es parar, no hacer nada, ni siquiera pensar, sólo sentir, sólo respirar, sólo aceptar con el corazón aquello que está pasando. Y como el ritmo del mar, permitir que el agua vaya y regrese.

Si el conflicto deja un margen de acción, entonces está en amarillo y la señal es de prevención, el mensaje es que avancemos, pero que avancemos con extrema precaución, no con miedo, sólo con precaución. En este escenario no hay que detenerse, simplemente disminuir la velocidad y redoblar la atención para descubrir cuál es el camino alterno para continuar.

Nos formamos a partir de los conflictos, aprendemos cuando nuestros deseos no son cumplidos, cuando las cosas no salen como queremos sino como se nos revelan desde algún lugar divino.

Es necesario aprender a bailar en el conflicto sin perder el entusiasmo, manteniendo la fe y el amor por nuestros sueños. Simplemente nos están rectificando el rumbo y a veces el universo se vale de métodos drásticos que incluso pueden llegar a generar dolor. Basta tomar un poquito de tiempo para curar esa pequeña herida y con mucho amor y humildad agradecer la lección que estamos recibiendo.

"El hombre se descubre 
cuando se mide con un obstáculo"
Antoine De Sant Exuperi