¿Qué es el Coaching Holístico?

Informedades

  Si hacemos conciencia de que el cuerpo es la materialización del alma, vamos a poder interpretar cada síntoma como aquella alarma interna ...

¿Qué es Dulcinea Despierta?

Dulcinea Despierta es un mundo de mujeres conscientes, en armonía con los hombres.

Aquí son bienvenidas las mujeres emprendedoras y profesionales que estén dispuestas a abrir la mente, los ojos y el corazón.

Nos dedicamos a investigar y hacer visibles distintas propuestas orientadas a remover creencias o a establecer mejores prácticas en distintos campos como salud, espiritualidad, felicidad, educación, entorno laboral, marco legal, relación de pareja, crianza, maternidad y todo lo que interesa a mujeres despiertas que van por caminos alternativos. 

Estamos en diversos medios de comunicación para acompañar procesos de transformación interior, sanación, cambio de modelo de vida, alcance de propósitos y realización de sueños. 












Creemos que la mujer como compañera, madre, abuela, tía, consejera, profesional, colega y amiga, está llamada a liderar el gran cambio que conducirá a la humanidad a una verdadera evolución a partir del amor y la plena conciencia.

Promovemos el encuentro sincero y personal con Dios, desde la creencia religiosa que cada cual tenga o incluso sin religión, porque creemos que el acceso a Dios no debe tener marca registrada ni bandera. 

Nuestro objetivo es brindar información para que  muchas mujeres se conecten entre sí y se abran más y mejores oportunidades de progreso y bienestar para todas.

Promovemos los siguientes valores:

  • Amor
  • Libertad
  • Conciencia
Invitamos a todas las mujeres conscientes que quieran estar en este mundo a seguir tres normas básicas:
  • No juzgar
  • No condenar
  • Perdonar
Respetamos las leyes humanas y seguimos una sola ley divina: LA LEY DEL AMOR.

¿Quién es Dulcinea?














Dulcinea es una y somos todas. Solas, acompañadas, tristes, felices, abatidas, optimistas. Dulcinea tiembla de emoción, esconde sus sentimientos; juega al escondite, pero siempre quiere que la encuentren o por lo menos que la busquen, a veces sólo para decir no.

Dulcinea es reflexiva, piensa y piensa cada vez que puede, pero no se concentra mucho, su mente se va como una hoja al viento y olvida lo que ya había pensado. Entonces busca a su otra "yo", que le lleva un buen registro de lo que iba a hacer.

Dulcinea llora muy fácil, pero no siempre le gusta que lo sepan. Le gusta que piensen que es fuerte, que puede con todo, y a veces no es cierto. Dulcinea es más frágil de lo que cree; se quiebra con todo, pero se recupera al instante porque el mundo la necesita, porque otros la esperan. 

Cuando Dulcinea no encuentra a quien amar, entristece, no sabe qué hacer con todo el amor que lleva por dentro y puede enfurecerse, pero no lo reconoce, le cuesta mucho reconocerlo. Entonces crea una armadura, un escudo impenetrable para que sólo unos pocos puedan entrar en su mundo y compartir su tristeza.

Cuando Dulcinea se enamora, se enamora de verdad, por eso no soporta la mentira, no resiste el engaño. Aún así es más grande su esperanza, entonces vuelve y avanza, cae y se levanta; se compone la falda, se arregla el pelo, y sigue siempre con la ilusión de un encuentro eterno. 

Dulcinea Despierta es como una cartera de mujer, tenemos un blog, un canal en Youtube, cuenta en Twitter, en Instagram, hacemos un congreso de mujeres conscientes una vez al año y ahora los jueves a las 22 horas Buenos Aires, transmitimos en vivo desde nuestra página de Facebook.

Nos dedicamos a divulgar información confiable para que muchas mujeres alcancen un despertar espiritual sensato, equilibrado y coherente. 

Promovemos la búsqueda de la felicidad, entendida como el gozo interior, la máxima elevación del espíritu que nos mantiene en equilibrio aunque la marea suba, aunque parezca que se cae la estantería de la vida, aunque las circunstancias sean adversas, que nada altere la alegría y la bondad del corazón.

Entendemos que hay momentos de quiebre, de duda, de parálisis y por eso una de nuestras consignas es una frase tomada del Budismo; "El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional". Claro que sentimos dolor frente a muchas adversidades, pero tenemos las herramientas para aprender a reconocerlo y transformarlo adecuadamente, para que no se exprese como ira o enojo, sino como la más bella de las emociones: tristeza.

Es preciso dejar fluir también la tristeza para que esa energía no se reprima y se acumule en nuestras células causando desastres, que no se arreglan con pastillas, eso disfraza la emoción, la cubre y no nos permite reaccionar naturalmente.

Aquí promovemos la Salud Emocional como punto de partida de cualquier modelo de vida sana, por encima de hábitos alimenticios y precauciones, lo más importante son los sentimientos de las personas y brindar los espacios para que se expresen libre y oportunamente.

Nosotras como mujeres no podemos detener el cambio climático exterior pero si podemos hacer la diferencia en el clima del hogar, para que no haya estrés ni angustia exagerada por cosas que no son trascendentes.

Como vórtices de energía y grandes emisoras de ondas electromagnéticas, debemos ser conscientes de cuánto influyen nuestras actitudes en el clima de nuestro entorno; si no estamos a gusto en un laburo, con una pareja, con nuestros hijos, con quien sea, vamos a causar bloqueos que tarde o temprano  nos toca atender, porque nuestra condición de mujeres tiene una alto impacto, aunque no siempre se reconozca abiertamente.

Buscamos hacernos conscientes de nuestro liderazgo y sobre todo de nuestra capacidad de empoderarnos de la salud, la espiritualidad y la felicidad propia y de quienes nos rodean.

Podemos curarnos y curar a nuestros seres queridos, se valen los remedios caseros, se vale usar la intuición y la visión remota; no podemos seguir dependiendo del médico, el psicólogo y el psiquiatra, siguiendo largos tratamientos biológicos y mentales que nos convierten en mujeres dopadas, dormidas y temerosas.

Somos la gran creación divina que alumbra la vida, sólo basta alzar la mirada y confiar plenamente en ese algo superior, en ese plan que no entendemos a plenitud pero que sin duda, determina muchos de nuestros pasos.




Si quieres ser habitante de este mundo de mujeres conscientes y participar en nuestros talleres y conferencias, escríbenos a dulcinea.despierta@gmail.com




abrazo enorme




Beatriz